por Caracas, 17 de abril de 2023.- Un conjunto de obras de arte han sido víctimas de daños por activistas del cambio climático que han decidido expresar su preocupación por el planeta ensuciando piezas de suma importancia para el mundo de la pintura y las artes.
Estos muchachos que suelen hacer estas prácticas «insurrectas» son grupos de dos o tres; la intención central es hacer un reclamo a las autoridades por la ausencia de verdaderas acciones que frenen el impacto de los combustibles fósiles.
El último trimestre del año pasado, en octubre y noviembre hubo varios ataques a museos, donde jóvenes entraban y luego de estar dentro de los recintos rociaban cualquier líquido que permitiera ensuciar la obra sin importar los limites de seguridad que suele haber en estos espacios.
A partir de octubre ocurrieron hechos como medida de protesta que involucran museos y galerías donde se exponen obras de pintores que marcaron hitos en su estilo.
Comencemos con una obra de Monet, valorada en 110 millones de dólares, la cual bombardeada de puré de papas por un un grupo de activistas radicales.
Se trata del grupo Última Generación que decidieron ensuciar un famoso cuadro del pintor francés que se encuentra en Museo Barberini de Potsdam.
La intención de estos chicos era hacer un llamado para «combatir el cambio climático«.
Los días posteriores, una situación irregular ocurrió en el museo Mauritshuis en La Haya.
Jóvenes activistas por el clima decidieron causar daños a la obra “Joven de la Perla” de Johannes Vermeer; el hecho desencadenó que fueran a prisión por dos meses.
Este icónico espacio alberga obras maestras de Rembrandt y Vermeer, este último nació en Delft (Países Bajos), llevó la pintura de género holandesa a su máximo apogeo.
En noviembre de 2022, las redes volvieron a estallar luego de que activistas ecológicos cubrieran de harina una obra del mítico Andy Warhol, el hecho ocurrió en Milán.
«Hay un colapso ecológico en marcha», se le escuchó decir a los activistas, mientras cubrían de harina un auto intervenido por el artista en 1979.
En ese mismo mes, nuevamente otro grupo atacó otra obra del artista plástico.
Dos activistas se adhirieron con pegamento a «Latas de sopa Campbell«, ésta vez la exigencia era para el gobierno australiano y el subsidio a los combustibles fósiles.
Paradójicamente estos hechos han ocurrido en Europa, donde aunque la visión ecológica es más amplia también ocurren estos ataque que algunos han calificado de «desaciertos«.
Viena tampoco escapó de estos sucesos, fue el 15 de noviembre del año pasado cuando otro grupo de personas decidieron rociar aceite negro sobre una obra de Gustav Klimt ubicada en el Museo Leopold.
La afectada fue la oba «Muerte y Vida», los manifestantes pedían que cesaran las perforaciones de petróleo y gas.
«Nos estamos precipitando al infierno climático, conocemos este problema desde hace 50 años»
Y por si fuera poco, el legendario Vicent van Gogh también paga las consecuencias de las acciones de estos activistas.
El 4 de noviembre, los miembros de la organización Última Generación colocaron puré de verduras sobre la obra «El Sembrador».
El 11 de noviembre de 2022, le tocó el turno a Edvard Munch, su famosa obra «El Grito» intentó ser vandalizada por activistas en Noruega.
Los chicos que vestían de negro fueron detenidos por oficiales que pudieron detener la acción, la intención era colocar pegamento en la obra.
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2 comentarios en «Entre la conciencia y el vandalismo | Obras de arte no escapan de la lucha por el cambio climático (+VIDEOS)»